

Tú, mi amigo, que te vas por el camino que te hemos trazado,
sí, te hemos trazado, tal vez no yo directamente,
aunque, si a tus hijos, si es que los tienes,
No por el mal que quiera hacer, sino por la inacción de mis palabras.
Ya fueron mis ancestros y los de aquel,
quienes te colocaron en este camino.
Mal por aquel que tuvo chance y no la aprovechó,
Pero pobre de ti que jamás la has tenido.
Pero no soy el único culpable de todo esto,
No, por que mientras te hablo hay otros por ahí,
otros que se hacen llamar sindicalcitas que andan matándose por ahí
tomando a la gente de rehén por reclamos casi sin sentido,
sin importar a quien halla que pisar
ya seas tú ya sea yo.
Por que toda situación por grave que fuese,
todo reclamo por valido que pareciese,
Pierde su fuerza si no respeta,
el contexto en el que este se encuentra
la sociedad a la que reclama,
por que el gobierno no es más que tú y yo,
el gobierno somos todos.
Pero por que incurrir en el discurso de lo mucho y poco,
De lo bueno y lo malo,
Ya que para mi fue incomodo y vergonzoso este trabajo,
Una tomadura de pelo de quienes me lo pidieron,
Y debo decirte mi amigo que lamentablemente….
Con sus reglas y demás terminaron por obligarme,
O sea, ya soy solo otro más.
Ja critica le dicen,
crítica será el día que quien la escuche o la vea,
haga algo por cambiar la situación,
y no solo la cuelgue en un salón de clases.
Ahora mi amigo, me despido
Dejándote solo por tu gris y desolado camino,
Camino en el que nosotros te pusimos.